Lo sabrán los queridos y TMI para los nuevos pero El Flaco y Grasas diletaban sobre las tablas mucho. De esa época nos queda saber que hacíamos más mierda que cosas buenas (ninguna) y tener una primera visión de lo que era gestionar recursos humanos y materiales con eficiencia (poco). De ese poco nace una de mis frases favoritas que gritaba cuando algo iba mal ¡RDA, RDA, RDA! Porque en serio, ¿hay algo más divertido e ineficiente que la República Democrática alemana?
Por supuesto que no
En nuestros sueños y en promesas falsas, íbamos a ser expatriados al país más eficiente del mundo, a la orgía de gestionar recursos como Dios manda y además triunfar dominando al resto con un fiero yugo de libertad.
Guess again.